La localidad de Santa Regina avanza con un proyecto de forestación que no solo busca mejorar el paisaje urbano, sino también rescatar símbolos tradicionales del pueblo. El jueves 24 de julio, la secretaria de Producción, Promoción y Medio Ambiente, Mónica Spertino, visitó la localidad para recorrer los trabajos realizados junto a personal municipal y vecinos.
La iniciativa apunta a revitalizar los espacios públicos con la plantación de árboles y especies ornamentales. Jorge Leani, encargado de la Delegación Municipal, brindó detalles del trabajo que se lleva adelante. “Plantamos árboles y plantas para mejorar la belleza natural y proporcionar sombra”, explicó.
Uno de los puntos más destacados fue la reconstrucción de la cruz ubicada en uno de los paseos principales del pueblo. “Fue reconstruida utilizando paraísos. Esto permite que recobre el toque distintivo y simbólico que tiene desde que se armó. Agregamos más ejemplares para reemplazar los que se habían secado y que quede bien armada”, señaló Leani.
La forestación también incluyó la plantación de sauces en el predio de la Capilla San José, un lugar de referencia para la comunidad. Según indicaron desde la Secretaría, se prevé un plan de mantenimiento regular para garantizar el buen estado de la vegetación y del mobiliario simbólico.
Leani aprovechó la oportunidad para agradecer a quienes colaboraron con el proyecto. “Quiero destacar a la estancia Fortín de Gainza, que a través de su encargado Marcos Echaniz donó todas las plantas. También a Camilo Crusat y Alfredo Pereyra, los empleados municipales que vinieron desde Villegas junto a Mónica Spertino, y por supuesto a los ocho trabajadores de calle de nuestra delegación, que hicieron los hoyos y campanas de todas las plantas”, expresó.
La propuesta representa un paso más en la apuesta por un entorno más verde, cuidado y con identidad, fortaleciendo el vínculo entre el ambiente, la historia y la vida cotidiana de los vecinos de Santa Regina.
domingo, 27 de julio de 2025
Forestación en Santa Regina: compromiso con el entorno natural y la identidad local
Publicado por Walter Mackay en 3:49:00