miércoles, 18 de noviembre de 2015

Semana de la Prevención del Cáncer de Piel

Miércoles 18 y jueves 19 de Noviembre acercate al Hospital Gral Villegas de 8hs a 12hs y 14hs a 17hs.
La luz solar brinda energía, calor, Cáncer de piel: cuatro de cada cinco casos se pueden prevenir
interviene en la producción de vitamina D y modifica los estados de ánimo. Pero el aumento de la incidencia de cáncer de piel en las últimas décadas está estrechamente relacionado con las actividades al aire libre. La buena noticia es que cuatro de cada cinco casos se pueden prevenir.
La mayoría de los casos de cáncer de piel son causados por la exposición a las radiaciones ultra violeta (UV), ya sea procedentes del sol o de fuentes artificiales como las camas solares. El efecto de estos rayos en el cuerpo es acumulativo, progresivo e irreversible, por lo tanto es probable que la exposición excesiva de los niños y adolescentes intervenga en la aparición de este tipo de patologías en etapas posteriores de la vida.
El sol también afecta a los ojos. Se estima que el 5% de las cataratas, a nivel mundial, se pueden atribuir directamente a la exposición de los rayos UV. Efectos sobre la salud
En cantidades pequeñas, las radiaciones UV son fundamentales para la buena salud y desempeñan una función esencial en la producción de vitamina D por el organismo. Esta vitamina fortalece los huesos y el sistema osteomuscular.
Los efectos biológicos de las radiaciones UV son muy diversos y dependen de su longitud de onda, penetración en la piel, tiempo de exposición, hora del día, distintas estaciones del año, la altura y la polución ambiental.
Signos para estar alertas
* Algunos síntomas pueden aparecer poco después de la exposición solar: entre ellos se destacan el eritema y la quemadura solar, las fotodermatosis y la inmunosupresión.
* Otros síntomas aparecen años más tarde: por ejemplo, la fotocarcinogénesis y el fotoenvejecimiento.
* Los daños oculares pueden ser cataratas, pterigión (aparición de un bultito blanco en la córnea), quemaduras en la córnea y lesiones en la retina.
Los extremos de la vida, ancianos y niños, están más expuestos a las inclemencias climáticas. Ambos grupos etarios deben tener especial cuidado con el calor, ya que los puede afectar con deshidrataciones. Esto sucede en especial a la gente mayor que está medicada con diuréticos y los niños que están expuestos al sol o padecen cuadros febriles y gastrointestinales.