Cuando el plural
se hace presente, los resultados se multiplican. Esto es lo que acaba de pasar
en el Puig en Acción, edición “Sangre”. Hubo un plural detrás de él, un
“nosotros”, ese que no hace falta incluir dentro de “Te queremos tanto”, nombre
de la asociación civil responsable de la edición 2012. Y cuando ese plural se
puso en acción, el Puig sucedió, diverso, variado, enriquecido.
Las
singularidades del grupo se fueron conectando según sus filiaciones artísticas:
la música, la fotografía, el arte, la actuación, la escritura, la manipulación
de objetos… Así nacieron, se sostuvieron y pusieron en escena los distintos
productos que fue posible recorrer durante estos cuatro fines de semana (del 19
de octubre al 11 de noviembre):
Los basados en
“Sangre de amor correspondido”, la novela protagonista, a 30 años de su
publicación, con: la novedosa propuesta de los títeres, que gastó la vereda del
Español y el paseo de la Memoria; los cuatro cuadros de la murga, que fueron
contando la historia de Josemar, protagonista de la novela, en diferentes
lugares de la ciudad; el stand up “Claramente” que se valió del humor y la
ironía; la puesta “Mujeres de sangre”, que construyó su relato desde la mirada
femenina; la movilizadora puesta en percusión de “A golpes se hacen”, que
desnudó la confesión de los varones; la muestra de fotografías y las dos
muestras de arte (la del restorán El Gallo y la del hall del Español) que
reflejaron muy diversos momentos e interpretaciones del texto; los talleres de
lectura y escritura, que permitieron ahondar y jugar; el concurso de relatos
breves, que abrió espacios a los enhebradores de palabras; y las canciones de
Edelmiro Palma en la exquisita tarde de cierre del concurso.
. La otra
propuesta local, no basada en la novela cumpleañera, pero temáticamente
conectada a ella: “Bodas de sangre”, que reactivó y movilizó al barrio del
viejo molino Fénix.
. Las propuestas
foráneas, vinculadas al universo Puig: un simposio vía internet que conectó
Villegas con Rio de Janeiro y permitió que varios especialistas en su obra de
aquí y allá intercalaran sus ponencias; el ciclo de cine que conectó a nuestro
escritor con quienes lo influenciaron y a quienes él marcó, y que homenajeó aun
en vida a Leonardo Favio; y la deliciosa pieza de teatro “Impalpable”, que tuvo
también una edición para las escuelas.
Para completar
la fiesta que se venía viviendo, el domingo 11 la plaza tomó forma y color
desde la tarde temprana. La muestra de fotos confirmó una vez más que era itinerante
y se metió de lleno en el lugar. Distintos materiales reciclables se reconvirtieron:
cajas de leche y papeles de diario tomaron forma de cobras y pájaros; papeles y
cartones dieron soporte a pequeños libritos que colgaban de los árboles; viejos
almanaques prestaron su espalda para ser dibujados, y los visitantes pudieron
escribir en pequeños cartoncitos si fueran una cobra a quién morderían. Mientras
tanto, los titiriteros seguían mostrando recortes de la vida de Josemar en sus
intrigantes cajas privadas; los chicos andaban con sus skates; y la banda de Sr
Flavio probaba sonido, le cedía lugar a nuestros músicos y murgueros, y cerraba
la noche haciendo bailar y cantar a la plaza entera.
Son las cosas que provoca el plural: la
apropiación colectiva. Las ganas de hacer, de hacerse, de transformarse, tocar
al otro, al lugar, de contagiar y salir transformado. Tomar conciencia de que
el arte todo lo puede, que uno ya no es el mismo después de la experiencia, ni lo
son los otros, ni el espacio. Saber además que Puig no es de uno o dos, ni
siquiera de las más de 60 personas que hicieron posible este Puig en Acción.
Puig es de todos, de sus seguidores activos o pasivos y también de sus
detractores, visibles o anónimos, de los apasionados y hasta de los neutrales.
Puig es un vampiro al que una vez abierta la puerta, se te mete en la sangre y
el alma para siempre.
viernes, 16 de noviembre de 2012
Cierre del Puig en Acción
Publicado por Walter Mackay en 23:40:00