jueves, 21 de noviembre de 2019

Padre Pepe: “la lógica del Hogar de Cristo es que la persona venga libremente”

El Intendente Eduardo Campana junto al Padre José María “Pepe” Di Paola, Monseñor Ariel Torrado Mosconi, Romina Domínguez Carvalho y el Padre Daniel Cassani presentaron el Hogar de Cristo General Villegas que estará emplazado en Barrio La Trocha.
El Hogar de Cristo es una federación que tiene como finalidad dar respuesta integral a situaciones de vulnerabilidad social y/o consumos problemáticos de sustancias psicoactivas, poniendo en primer lugar a la persona y sus cualidades. El municipio de General Villegas, junto a la diócesis de 9 de Julio, la Parroquia nuestra Señora del Carmen y la fundación están poniendo en marcha este proyecto.
En Conferencia de Prensa el Intendente agradeció al Obispo, al Padre Pepe y al Padre Daniel y particularmente a Romina Domínguez Carvalho (Directora de Desarrollo Social Local) por su trabajo en este plan.
“Las ideas se ponen en marcha y que podamos coordinar y reunirnos también lleva un tiempo y es un sueño que se nos cumple y nos va a ayudar muchísimo a nuestra comunidad y fundamentalmente a los jóvenes, principalmente con la experiencia que tienen y en especial el Padre Pepe y por esfuerzo que han puesto para poder llevar a cabo este proyecto”, dijo además Campana.
Por su parte el Padre Pepe Di Paola también agradeció la invitación y poder compartir la jornada junto a nuestro grupo San Juan Bosco de José León Suárez.
“Creo que lo que ha demostrado el Hogar de Cristo en estos 12 años es que una comunidad puede darles lugar a aquellos jóvenes que están atravesados por el problema de la droga y hacerse cargo, porque muchas veces se piensa en derivarlos, como que el problema lo tiene que resolver otro”, aseguró.
Además consideró que “de pronto que una comunidad se haga cargo de atender y darle una propuesta de vida a los jóvenes es realmente muy interesante y creativo. Está demostrado que es posible porque en estos 12 años muchos jóvenes han retomado sus parejas, ocupado sus hijos, han comenzado un estudio, otros lo han terminado y están trabajando y es porque la comunidad les dio esa posibilidad”.
“El concepto que manejamos tiene que ver con la adecuación que es la que veo aquí con el Municipio, que en este caso toma la iniciativa, se hace cargo, la Iglesia, como organización que asume la responsabilidad y seguramente las otras organizaciones que se irán sumando. En esta ecuación se puede dar la primera posibilidad a los jóvenes de una recuperación. Es realmente interesante y creativo porque cada uno le va a dar un toque especial de acuerdo al lugar donde se desarrolla”, añadió.
Del mismo modo explicó que “hay Hogares de Cristo en villas, en pueblos, en pueblos originarios, en poblaciones con diferentes factores de vulnerabilidad como trans, así que el Hogar de Cristo es bajo el lema “Abrazar la vida como viene” y abrazar al hermano sin ningún tipo de acepción y se va creciendo en la medida que la misma comunidad ve las necesidades”.
“El abordaje territorial hace que nos ocupemos no solamente de la droga con el joven sino también de todo lo que es su vida. Ese joven tiene un problema que arrastra de su familia, no tiene capacitación para el trabajo, quizás nunca tuvo una oportunidad de estudiar y viene con varios fracasos en su vida particular y de familia, tal vez tiene alguna enfermedad producto de la dejadez que tuvo varios años su vida, entonces es muy importante el abordaje de manera completa”, consideró.
También destacó “me parece muy importante que el centro barrial esté muy vinculado al hospital, a quien hace los documentos, a que haya oficios para aprender y a educación como plan FINES, para terminar la primaria y secundaria.”
“Lo bueno del Hogar de Cristo es que va a ir articulando con distintas partes del Estado que quizás ofrecen oportunidades sueltas y el centro barrial aprovecha muchas cosas que a veces solos no van a poder a acceder”, dijo.
Además confió que “la lógica del Hogar de Cristo es que la persona venga libremente, muchas veces pueden venir sugeridos por el Estado, porque muchas veces en las escuelas las directoras no saben qué hacer con un adicto, no lo quieren excluir del aula y con toda razón porque lo aprecian y valoran que termine, pero también sienten que no los están ayudando. O muchas veces sucede en los clubes que saben que alguien en un equipo se está drogando y no saben cómo abordar el tema. Ya tener un lugar hace que las distintas instituciones empiecen a tomarla como propio”.
“Este abordaje es libre, pero los adultos que dirigen instituciones tienen que acercarse y saber que es el lugar apropiado para que pueda seguir con su escuela, equipo y pueda cambiar. Es una oportunidad que les ofrece Villegas para que esa persona retome el buen camino”, resaltó.
Asimismo Romina Domínguez Carvalho reveló que fue un proceso complejo, largo, de mucho trabajo de mucha gente.
“En lo personal para mí fue un trabajo importante y debo reconocer que tuve el apoyo incondicional del Ejecutivo y esto es un agradecimiento al Intendente y todo su equipo que decidió acompañar, Monseñor Ariel y por supuesto el Padre Pepe, la verdad es que hemos trabajado arduamente”, reflexionó.


Por último analizó que “las necesidades exceden al barrio y creo que tienen que ver con la comunidad y de un consumo que por el tipo de sociedad en que vivimos está al alcance de los chicos sin ninguna distinción y la idea es tomar la vida como viene, sin juzgar y hacer de este Hogar de Cristo una familia grande para todos los que lo necesiten en Villegas”.