El único gol del partido lo convirtió Emanuel Hermida, quien tomó el rebote luego que Jorge Mendoza le atajara con sus piernas un tiro penal a Carlos Quiña. Por la falta que generó la sanción de la pena máxima, el árbitro Paolo Macchi expulsó, como último recurso, a Roque Silvestre, uno de los marcadores centrales de la visita.
El tiempo que duró el partido jugado en la segunda fase del Torneo del Interior, los dueños de casa fueron un más que su rival, que vino decidido a esperar qué hacía el equipo dirigido por Mauricio Giganti y no tuvo profundidad en ningún momento. Ferro, por su parte, dominó pelota y terreno, aunque aunque por varios pasajes no supo usufructuar las posibilidades que le daba el juego y un rival timorato que, probablemente, vino por un resultado que lo mantuviera en carrera.
Ya a los 6 minutos, los dueños de casa mostraron credenciales, porque tras una buena jugada colectiva Rosiere remató al arco, hubo un rebote y Nicolay la empujó para que la pelota llegara al fondo del arco, pero la anotación fue anulada a instancias de uno de los asistentes, que marcó la posición adelantada del goleador.
La sociedad Hermida-Rosiere-Nicolay le dio buenos réditos a Ferro, y a los 16 éste remató desviado desde buena posición, cuando Mendoza tenía muy poco por hacer. Ferro era más, pero no podía demostrarlo dentro del área.
Mientras los bonaerenses apostaban tibiamente a lo que podían aportar Leonardo González y Raúl Gómez, los anfitriones sabían que debían aprovechar la oportunidad de sacar una buena ventaja de cara a la revancha, pero era primordial anotar el primer gol y así allanar el camino para el resto del cotejo.
Tanta insinuación, porque a decir verdad hasta ese momento el ‘1’ de Ameghino había sido poco más que un espectador de lujo, tuvo su rédito a los 30 minutos, cuando Nicolay le ganó la espalda a Silvestre y aprovechó el preciso pase de Hermida para quedar cara a cara con Mendoza. El defensor ‘naranja’ lo tomó de atrás y le cometió un claro penal, pero además, el árbitro entendió que el defensor había incurrido en lo que el reglamento tipifica como “último recurso”, por lo que le mostró la tarjeta roja, algo que fue muy protestado por los jugadores de la visita.
Del tiro desde los doce pasos se hizo cargo Carlos Quiña, quien disparó abajo y casi al centro del arco, permitiendo que Mendoza rechazara con sus piernas, pero la pelota -que salió hacia su lado derecho- llegó a los pies de Hermida, quien no tuvo mayores inconvenientes para derrotar al exgolero del ‘Verde’.
No pasó mucho más hasta el final de la etapa inicial, porque si bien los del barrio Talleres profundizaron su dominio, en sólo una oportunidad llegaron con peligro, cuando una magnífica intervención de Mendoza le impidió a Hermida anotar su segunda conquista de la noche.
En tanto, Atlético Ameghino sólo intentó un disparo al arco, fue a los 41 cuando Roberto Palacios ejecutó un tiro libre desde alrededor de 35 metros y, ayudado por el viento, exigió a Matías Boto, que hasta ese momento sólo había tocado la pelota cuando algún compañero se la había pasado para salir jugando desde la última línea.
Terminó el primer tiempo y se vino el meteoro. La lluvia y el viento se intensificaron notablemente y el corte de luz dejó a oscuras a todo el estadio, quedando además la cancha prácticamente inundada a los pocos minutos. En esos momentos, el árbitro decidió que el partido quedara suspendido a la espera de lo que, por la mañana, resuelva el Concejo Federal de Fútbol.
El tiempo que duró el partido jugado en la segunda fase del Torneo del Interior, los dueños de casa fueron un más que su rival, que vino decidido a esperar qué hacía el equipo dirigido por Mauricio Giganti y no tuvo profundidad en ningún momento. Ferro, por su parte, dominó pelota y terreno, aunque aunque por varios pasajes no supo usufructuar las posibilidades que le daba el juego y un rival timorato que, probablemente, vino por un resultado que lo mantuviera en carrera.
Ya a los 6 minutos, los dueños de casa mostraron credenciales, porque tras una buena jugada colectiva Rosiere remató al arco, hubo un rebote y Nicolay la empujó para que la pelota llegara al fondo del arco, pero la anotación fue anulada a instancias de uno de los asistentes, que marcó la posición adelantada del goleador.
La sociedad Hermida-Rosiere-Nicolay le dio buenos réditos a Ferro, y a los 16 éste remató desviado desde buena posición, cuando Mendoza tenía muy poco por hacer. Ferro era más, pero no podía demostrarlo dentro del área.
Mientras los bonaerenses apostaban tibiamente a lo que podían aportar Leonardo González y Raúl Gómez, los anfitriones sabían que debían aprovechar la oportunidad de sacar una buena ventaja de cara a la revancha, pero era primordial anotar el primer gol y así allanar el camino para el resto del cotejo.
Tanta insinuación, porque a decir verdad hasta ese momento el ‘1’ de Ameghino había sido poco más que un espectador de lujo, tuvo su rédito a los 30 minutos, cuando Nicolay le ganó la espalda a Silvestre y aprovechó el preciso pase de Hermida para quedar cara a cara con Mendoza. El defensor ‘naranja’ lo tomó de atrás y le cometió un claro penal, pero además, el árbitro entendió que el defensor había incurrido en lo que el reglamento tipifica como “último recurso”, por lo que le mostró la tarjeta roja, algo que fue muy protestado por los jugadores de la visita.
Del tiro desde los doce pasos se hizo cargo Carlos Quiña, quien disparó abajo y casi al centro del arco, permitiendo que Mendoza rechazara con sus piernas, pero la pelota -que salió hacia su lado derecho- llegó a los pies de Hermida, quien no tuvo mayores inconvenientes para derrotar al exgolero del ‘Verde’.
No pasó mucho más hasta el final de la etapa inicial, porque si bien los del barrio Talleres profundizaron su dominio, en sólo una oportunidad llegaron con peligro, cuando una magnífica intervención de Mendoza le impidió a Hermida anotar su segunda conquista de la noche.
En tanto, Atlético Ameghino sólo intentó un disparo al arco, fue a los 41 cuando Roberto Palacios ejecutó un tiro libre desde alrededor de 35 metros y, ayudado por el viento, exigió a Matías Boto, que hasta ese momento sólo había tocado la pelota cuando algún compañero se la había pasado para salir jugando desde la última línea.
Terminó el primer tiempo y se vino el meteoro. La lluvia y el viento se intensificaron notablemente y el corte de luz dejó a oscuras a todo el estadio, quedando además la cancha prácticamente inundada a los pocos minutos. En esos momentos, el árbitro decidió que el partido quedara suspendido a la espera de lo que, por la mañana, resuelva el Concejo Federal de Fútbol.
Deberían jugarse hoy
De acuerdo al reglamento del Fútbol Argentino, los encuentros que se suspendieron ayer por la fuerte tormenta deberían continuar hoy, pero la reanudación queda supeditada a las condiciones meteorológicas y al estado de los campos de juego.Los árbitros pasaron ayer el correspondiente informe a la sede del Consejo Federal, que seguramente por la mañana determinará como será la continuidad de los cotejos que anoche se jugaban en el ‘Coloso de Talleres' y en el ‘Nuevo Pacaembú'.
Fuente diario La Reforma de Gral. Pico.