La concejal Mariela Schiavi, del Pro presentó su renuncia en el día de hoy a través de una carta presentada en el H. Concejo Deliberante.
Schiavi fue elegida en su rol de concejal en el año 2007 representando al partido PRO, que en las elecciones de 2009 se disgregó.
Las causas de su renuncia aducen a motivos personales e incopatibilidad de criterios con miembros del partido que supo representar.
La reemplazaría Beatriz Martín quien fue tercera en la lista de candidatos a concejales por Unión Pro en el año 2007.
Sr. Presidente del
Honorable Concejo Deliberante de General Villegas
Don Ernesto Juan Segretín
Presente
Por medio de la presente elevo mi renuncia con carácter de indeclinable al cargo de Concejal en el que fui elegida por los ciudadanos del Partido de General Villegas en 2007 y que he ocupado hasta la fecha en el espacio político PRO.
Me llevan a tomar tal decisión causas personales y otras que impiden definitivamente que continúe desarrollando la labor legislativa en forma independiente y sin presiones, tal como debe ser. Estas otras causas que menciono se originan en declaraciones vertidas en medios de comunicación local sobre mi desempeño como legisladora, las que han ofendido hondamente mi honor y el de mi familia. Asimismo, teniendo en cuenta la incompatibilidad de criterios que mantengo con los actuales representantes del partido PRO a nivel local, y con el propósito que siempre guía mis pasos de salvaguardar el buen nombre e integridad de las instituciones en general y del Honorable Concejo Deliberante en particular, es que tomo tal decisión.
Participé por primera vez en política en las elecciones de 2007 cuando fui convocada por un grupo de vecinos de Villegas para integrar la lista del PRO, partido entonces recientemente formado que buscaba gente con buena reputación para integrarlo. Acepté honrada y dispuesta a trabajar y de salvar diferencias, toda vez que - como en todo grupo – es normal tener más afinidad con unos que con otros de sus integrantes. Agregando a las habituales ocupaciones domésticas, familiares y laborales las del Concejo, ingresé para participar movida por la vocación de servicio y no en busca de beneficios personales, prueba de ello es que renuncié a un sueldo mejor remunerado para dedicarme de lleno al trabajo de concejal.
Por diferencias internas de gente del grupo, en oportunidad de las elecciones 2009 el mismo se disgregó y quedé, como es de conocimiento de todos, como única representante del PRO en un monobloque. Con el correr de los meses, a nivel local el partido pasó a quedar representado por pocos afiliados con los que tengo enormes diferencias de criterios y principios. A pesar de ello continué trabajando y presentando proyectos, en soledad y tomando distancia de todas aquellas situaciones o hechos externos que pudieran afectar negativamente a este honorable cuerpo. Estoy convencida de que no podemos dedicar tiempo a peleas estériles cuando todos los días la gente vive tratando de salir adelante en medio de infinidad de problemas que nos hemos comprometido a solucionar. Siempre manifesté la idea de diálogo, tolerancia, respeto, valores que debemos tener presentes en todos los momentos de nuestras vidas.
Por otro lado, y atendiendo a ciertas manifestaciones de tipo mediático que en cierto modo desmerecen la labor del Concejal, quiero dejar en claro para quien no lo sepa que el trabajo de Concejal no se limita a las horas que demandan las sesiones y las reuniones de comisiones; también se trabaja en la comunidad, en nuestros hogares, investigando, preparando proyectos, sin asesores, viáticos ni ninguna otra facilidad o prerrogativa.
No obstante todo lo expresado respecto de mi situación particular, sostengo que es indispensable que la gente común que sienta que puede aportar su conocimiento y parte de su tiempo, se integre a partidos políticos, ya que ésta será la única manera de refrendar la democracia y de desplazar a las personas que sólo les interesa obtener un rédito personal de su actuación política. Estoy convencida que los partidos políticos son los canales indispensables para sacar adelante a la Nación toda, y que cada uno de ellos tiene problemas internos que se deben solucionar desde adentro y no desde afuera, y las personas que no puedan con ello deberían dar un paso al costado. Considero que la banca de concejal le pertenece al pueblo, el pueblo que votó por un proyecto determinado en el cual nosotros - las personas - somos sólo una circunstancia. Seguramente quien me reemplace sabrá honrar esta banca y este cuerpo de la misma forma que lo he hecho yo.
Por último, deseo agradecer profundamente al Sr. Presidente del Honorable Concejo Deliberante, a los señores concejales de los distintos bloques, al Secretario y a los demás integrantes del honorable cuerpo que me acompañaron durante este tiempo, con quienes siempre he tenido diálogo y quienes me han tratado con respeto, de manera amable, servicial y correcta. A todos muchísimas gracias.
Sin más que agregar, quedo a su disposición para cualquier otra aclaración que sea necesaria sobre el particular. Le saluda respetuosamente,
Ana Mariela Schiavi